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"Nuestros hijos van a morir de hambre" dice Aissa, desplazada en Borno, Nigeria.
Ella es una de las tantas víctimas de esta emergencia que todavía no ha terminado. Cientos de miles de personas todavía dependen enteramente de la ayuda humanitaria
La devastadora crisis humanitaria continúa extendiéndose por el noreste de Nigeria. En el estado de Borno, miles de niños murieron por la combinación letal de malaria, desnutrición y sarampión.
Desde 2014 Médicos Sin Fronteras brinda asistencia médica de emergencia a la población, entregando alimentos y tratando los casos severos de desnutrición, sobre todo entre los más pequeños. Pero la combinación de factores como la falta total de alimentos y la imposibilidad de conseguirlos, la concentración de población desplazada, los niveles de desnutrición por encima de los umbrales de emergencia y la falta de agua potable, provocaron que en el último año miles de niños se encuentren en una situación de extrema vulnerabilidad. |
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