Azotan a los empleados de un banco chino por mal desempeño

Jornadas de motivación

Un video muestra cómo los banqueros son golpeados con una vara por no esforzarse más durante un curso de capacitación.

Azotes a los empleados de un banco chino por falta de motivación./ Captura de video

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Hay métodos y métodos de motivación. China tiene fama de ser uno de los países más estrictos con las normas y los objetivos. Desde el país asiático llega hoy un video que ha indignado a más de uno porla humillación en público que han sufrido algunos empleados de un banco.

Jiang Yang, un entrenador de motivación externo, se encargó de poner a prueba a los cerca de 200 trabajadores del Banco Comercial Rural. Una entidad situada en la localidad de Changzhi que busca “avanzar en su rendimiento”, según explican ellos mismos en su web.

Hasta aquí todo normal hasta el momento en que dicho entrenadorseleccionó a los ocho peores en sus pruebas. Para castigarlos e intentar corregirlos decide exponerlos en público. Jiang Yang tomó un micrófono para que todos oyeran su bronca. Les preguntó por qué habían obtenido las peores notas y les dijo que eso era fallar a la compañía. A continuación empezó a repartir varias rondas de azotes a los empleados. Una de las mujeres trató de escabullirse de uno de los golpes y eso provocó que el entrenador le diera con más fuerza en la siguiente pasada.

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El video del castigo, que recuerda a los escarmientos públicos, fue grabado este sábado por uno de los testigos presentes. A partir de ahí empezó a circular por las redes sociales chinas donde ha provocado un aluvión de críticas. Los usuarios lo ven como una violación de los derechos fundamentales y una humillación pasada de tono.

Jiang Yang defiende su método con azotes como “una de las vías más efectivas en sus funciones”, aunque al mismo tiempo entiende que no todos lo acepten.

Según recoge el diario Beijing Times, algunos trabajadores aseguraron que los azotes eran sólo una parte de la jornada de formación y que hubo 16 banqueros a los que se les rapó la cabeza como castigo.

Ante el escándalo, la sede nacional del banco ha confirmado el despido de dos ejecutivos encargados de llevar a cabo estas jornadas de motivación. Además, afirman que indemnizarán a los ocho azotados.